La nueva era de máquinas expendedoras: Vending sostenible e inteligente
El sector del vending trabaja para adaptar sus máquinas expendedoras y ofrecer opciones al cliente que sean asequibles y contribuyan a la conservación del entorno
Las sociedades actuales nos enfrentamos a un gran reto medioambiental derivado de la superpoblación, el consumo y la tecnología. Es decir, cada vez somos más, consumimos más y no disponemos de la tecnología suficiente que garantice un equilibrio ecológico. Esta situación tiene consecuencias devastadoras para el medioambiente, hace peligrar la economía y tiene efectos negativos sobre la salud de los ciudadanos debido a la contaminación atmosférica.
Frente a esta delicada situación, tenemos en nuestras manos el deber y la responsabilidad de proteger el entorno con medidas que garanticen la protección del medioambiente y el bienestar social. Por eso, cada vez son más las personas que toman conciencia y buscan alternativas para un consumo más sostenible.
Ante el perfil de un consumidor cada vez más consciente y proactivo, las empresas emprenden iniciativas que minimicen la huella medioambiental de sus procesos. El vending, como tantos otros sectores, también ha tenido que ir reinventándose para adaptarse a los cambios medioambientales, sociales y de consumo. Actualmente, uno de los desafíos de la distribución automática es reducir el impacto medioambiental y mejorar la responsabilidad de las compañías con el cuidado del planeta. El objetivo es conectar con un consumidor exigente y mejor informado que demanda a la organización responsabilidad con el entorno y con las personas.
Desde hace unos años, las empresas de vending y distribución automática están aplicando medidas de sostenibilidad y reciclaje para responder a las actuales preocupaciones sociales. En este sentido, el diseño y la innovación tecnológica se alzan como las grandes aliadas.
Reducción de residuos
Es una realidad más que evidente que el exceso de plásticos está causando enormes problemas ecológicos en los mares y océanos que amenazan con acabar con la vida marina. La reducción del uso de este material ya no es solamente una demanda social, si no una exigencia por parte de las instituciones europeas. En este sentido, el pasado mes de marzo, la Eurocámara aprobó la prohibición de los plásticos de un solo uso a partir de 2021, una medida a la que el sector del vending deberá adaptarse.
Pero desde hace ya algunos años, el sector del vending trabaja para adaptar sus máquinas expendedoras y ofrecer opciones al cliente que sean asequibles y contribuyan a la conservación del entorno fomentando el uso de productos que no generen tantos residuos, para así minimizar la huella medioambiental. Así, los productos de plástico de un solo uso, como botellas, vasos, paletinas o cubiertos, se sustituyen progresivamente por productos reutilizables o fabricados con materiales como el papel, la madera o el vidrio.
El PET, por ejemplo, que es un tipo de plástico usado en botellas de agua y envases de bebidas y muy resistente a la biodegradación, puede sustituirse fácilmente por alternativas mucho menos contaminantes como las botellas de cristal o los tetra brik. Los vasos de plástico y paletinas que se utilizan en la mayoría de las máquinas expendedoras de bebidas en las oficinas, hospitales, etc. para el café también tienen alternativa: vasos bio compostables, vasos de cartón y las paletinas de madera.
Cada vez son más las empresas concienciadas por el medio ambiente que apuestan por sustituir de sus máquinas expendedoras los artículos de un solo uso, como los vasos y paletinas de plástico no biodegradables, por materiales más respetuosos con el medioambiente.
Gestores de residuos
Hemos visto que el aumento constante en la generación de residuos causa graves problemas ambientales. El primer objetivo es reducir su uso, pero no menos importante es la gestión posterior que se hace de estos envases.
La tecnología ha permitido el desarrollo de sistemas para impedir que los residuos que pueden ser aprovechados, terminen en el vertedero, en las calles, ríos y playas. Muchas empresas de vending ya ofrecen a sus clientes máquinas que permiten hacer una gestión eficiente de los productos que se consumen.
Un gran ejemplo de esta apuesta por la innovación y la sostenibilidad son las máquinas compactadoras y trituradoras. Las primeras se utilizan para reciclar los productos PET, garantizando así que el plástico sigue su ciclo de reciclaje. Siguiendo el mismo modelo, las trituradoras trituran materiales como el papel o el aluminio. Además, muchas de estas máquinas incorporan un sistema de incentivos por cada producto reciclado para fomentar los hábitos de reciclaje entre los consumidores.
Productos saludables y sostenibles: del huerto a la máquina expendedora
En lo que se refiere a la alimentación, los hábitos de los consumidores también han cambiado. Conscientes del estrecho vínculo existente entre la alimentación y la salud y preocupados por su bienestar, los consumidores demandan productos saludables. En este sentido, en los últimos años, el sector ha apostado por máquinas expendedoras de productos sanos para aquellas personas preocupadas por mantener una dieta equilibrada. Las frutas, los frutos secos, las verduras y los lácteos tienen cada vez más presencia en la venta automática. Atrás se intenta dejar la imagen de una máquina expendedora de gran tamaño llena de chocolatinas, chucherías, refrescos y bollería industrial.
Y no solo eso, el consumidor también se preocupa por la procedencia de los artículos que consume, los ingredientes, el sistema de producción y la cadena de suministro. En los últimos años, el porcentaje de consumidores que compran productos ecológicos, bio, orgánicos y de comercio justo se ha incrementado considerablemente. Y parece que la tendencia sigue al alza. De hecho, según los últimos datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, los consumidores que compran al menos una vez a la semana alimentos bio y ecológicos, se ha incrementado un 9,2% en 2018. Actualmente el mercado de productos ecológicos se valora en unos 2.100 millones de euros.
En este sentido, una apuesta del sector para este año es introducir en la venta de productos para vending un componente ecológico y de sostenibilidad. A España, a diferencia de otros países, le queda un largo camino por recorrer ya que aún no es demasiado frecuente encontrar este tipo de productos en las máquinas de vending. En Alemania, por ejemplo, los productos de vending ecológicos ya suponen un 30% del total de productos de las máquinas de expendedoras.
En definitiva, el consumidor busca productos naturales y más equilibrados, como las frutas, las verduras o los yogures y que se hayan producido respetando el entorno y las personas. Así, poco a poco, se incrementa en edificios públicos, empresas y colegios la presencia de máquinas expendedoras de alimentos y bebidas que, además de ser saludables, son respetuosos con el medio ambiente.
A modo de resumen, la adaptación a las demandas de la sociedad es un desafío al que el sector del vending se enfrentará en los próximos años. Combinando la incorporación de productos ecológicos con prácticas responsables con el medio ambiente, como la reducción de residuos o el reciclaje, se conseguirá un equilibrio ecológico. Con la implementación de estas medidas, se reduce, por un lado, el impacto medioambiental y, por otro, también se consigue una mayor oferta que permite llegar a un público cada vez más exigente y comprometido.